El verdadero Wolverine

El misterioso animal que presta su identidad en X-Men

Wolverine
Andrea Bohl/Pixabay 

Wolverine es el nombre en inglés de un animal feroz y solitario que vive en las tierras frías del norte de Siberia, Europa y Norteamérica. Su nombre científico es Gulo gulo y en español se conoce como el glotón o carcayú. Es el miembro más grande de la familia Mustelidae, a la cual también pertenecen las nutrias, tejones, comadrejas y martas.

¿Los traductores se equivocaron de animal?

Como los aficionados de los comics sabrán, el nombre de Wolverine en español es el Lobezno. Pero el Wolverine de las películas tiene poco en común con un lobo cachorro (aparte de ser peludo), mientras su carácter es completamente fiel al glotón o carcayú. ¿Entonces por qué le cambiaron de nombre? Lo más probable es que a los traductores no se les hizo muy atractiva la idea de ponerle "el Glotón" al protagonista más sexy de la película.

Características del glotón

A primera vista, el glotón parece algo entre una marta y un oso pequeño. Es peludo y atractivo, de color negro y café con rayas claras en ambos lados, dando la impresión de un carácter dócil y hábitos lentos; pero las apariencias engañan. A pesar de su aspecto acogedor, el carcayú es veloz y extremadamente fuerte, más conocido por su costumbre de pelear en contra de animales mucho más grandes como osos y pumas. Y a menudo, pelear es su única opción. Aunque su olfato agudo, dientes rompehuesos y garras filosas semi-retractiles le permiten ser excelente cazador, las tundras y bosques boreales donde habita aportan pocos recursos. Puede caminar más de 30 kilómetros al día en busca de comida y aun así, frecuentemente se conforma con los restos de la caza de otro depredador; las peleas resultan cuando el depredador regresa para defender lo que queda de su cena.

El nombre del glotón proviene de la percepción de que devora grandes cantidades de carne, pero no toma en cuenta que también puede pasar semanas sin encontrar alimento. De hecho el hambre, las confrontaciones por comida y las acciones de los seres humanos (la caza, la pérdida de territorio y el calentamiento global) son las principales causas de muerte para esta especie.

Algunos dirían que su gran adaptabilidad es la única razón por la cual estos animales siguen existiendo. Pueden subir árboles y montañas, correr sobre la nieve, capturar presas grandes y chicas, escarbar hoyos profundos, pescar y combatir depredadores grandes. Pero la especie naturalmente tiene una densidad de población muy baja, ya que el territorio de un sólo macho puede abarcar cientos de kilómetros. Los glotones parecen tener una necesidad insaciable de seguir caminando y son completamente solitarios excepto en la época de celo; las hembras paren entre una y cinco crías una vez cada dos años, buscando pequeñas cuevas o haciendo hoyos bajo la nieve para hacer su madriguera.

Los glotones son perfectamente adaptados al frío. Sus garras les permiten escalar superficies heladas y sus pies están perfectamente formados para correr sobre la nieve. De hecho, esto les da la ventaja necesaria para poder cazar animales grandes en temporada de frío, aunque esta ventaja desaparece junto con la nieve. Algunos expertos han sugerido que el glotón depende de las temperaturas frías no tan sólo para poder cazar sino que también para conservar su presa: cuando logra matar un animal grande como un alce, no se le es posible acabarlo todo de una sola vez (¡aunque le digan glotón!). Lleva la carcasa a su madriguera, donde la guarda hasta poderla terminar de comer en otra ocasión. Los expertos razonan que el frío extremo les ayuda a conservar la carne más tiempo, permitiendo un aprovechamiento completo de los pocos recursos que tienen disponibles.

La población de glotones en el mundo

Actualmente existen muy pocos glotones (alrededor de 500) en todo el interior de Europa (no contando la península Escandinavia, Finlandia y Rusia) y aún menos en los Estados Unidos (no contando Alaska). En lugares donde todavía existen en mayores números, pueden cazar ovejas y renos semidomesticados, provocando la ira de los dueños. Aunque su habitat extremo y alejado minimiza su contacto con la humanidad, su población sigue en declive debido a su sensibilidad a los cambios provocados por los seres humanos, como la pérdida de territorio y las consecuencias del cambio climático.

El personaje del "Lobezno" o Wolverine de los X-Men incorpora todas las características principales del carcayú: su gran valor de pelear en contra de quien le amenace, sus garras fuertes y filosas, sus sentidos agudos, su soledad, su persistencia y su necesidad de continuar viajando. Ojalá que la película motive a más personas a comprender y defender este animal valiente.